jueves, 12 de octubre de 2017

EL CORAZÓN DE LA FLAUTA (fragmento) por Marco Antonio Montes de Oca

[Biografía de Marco Antonio Montes de Oca aquí]

Peces flores dibujos
Son tesoros que todavía persigo
Pero otros amigos de aquella edad
Prefieren el dinero que cambian mariposas en gusanos
y a ellos mismos convierte
En sucia parvada que el espacio ya no acoge
Y que sólo habla de números
Pero nunca al modo de Pitágoras

Sangran aroma ciruelos y claveles
La uva irradia su ser
Tan copiosamente como puede
Pero mis amigos
Mis antiguos amigos tan misteriosamente envejecidos
Espantan a pájaros y espantapájaros
Lo consumen todo y no regresan nada
Son polvo enamorado
Pero del polvo solamente

Quizá no lo saben
Pero el destino se despetala y nos deshoja
El fuego aborda nuestro gran galimatías
Y no sabe por dónde comenzar
Por todas partes brama la transparencia huracanada
Nubes y más nubes se rompen en mitad del pecho
Es difícil pasar la noche con uno mismo
Y cantar la resurrección del hombre salvaje
Difícil casi todo es difícil
Los reinos traspasan su propia orilla
Para ahogarse en la manga de los magos

Aun así te doy las gracias
Columna salpimentada con polvo de rubíes
Estío ensimismado marea blanca perfume milenario
Estamos contigo porque nos besas de improviso
Porque tu encaje de cohetes sí festona las pirámides
Sí atiza las llamas que equilibran su solo pie
Sobre mechas de paja
Sí derrama lágrimas verdes
Ácidos magníficos
Capaces de irritar a fósiles almejas

Ha roído la paciencia rojizas catedrales
Nada se mueve en esta galería dormida
Anegada en silencio la boca florece
Dice lo que tenía que decir
Por una vez va más allá del blanco y del disparo
Y retorna con varios plenilunios de repuesto
Al rincón más hostil de la caverna
Al lugar en que el exilio sus afrentas enardece
Cuando la muerte se pone su máscara de fósforo
Y es como un reloj que a sí mismo se consulta
Y olea y brilla a media noche
E incendia el nido del fénix
Y ya nada renace.

Composition 4 de Roland Topor.